Papada¿Como Corregirla?
La papada es una imperfección muy común, generalmente causada por un exceso de grasa adiposa debajo de la mandíbula. Por lo general, las personas con sobrepeso u obesas padecen este problema, pero también puede estar presente en aquellas que tienen un peso normal.
Hoy en día las posibilidades de tratamiento de este defecto son variadas y pueden ser tanto médicas como quirúrgicas.
Técnicas médicas para el tratamiento de la papada: ácido desoxicólico, radiofrecuencia fraccionada y HIFUs
En el campo de la medicina, la solución más sencilla al problema de la papada es sin duda la de las inyecciones de ácido desoxicólico (un ácido biliar también producido por nuestro hígado). Este medicamento es capaz de descomponer la membrana de fosfolípidos de las células grasas, descomponiéndolas por completo. En las primeras etapas, se desarrolla una marcada hinchazón en el área tratada que se reabsorbe gradualmente durante 10-15 días. Los tratamientos de este tipo se pueden realizar varias veces. El resultado final es totalmente apreciable al cabo de unos meses.
Este método debe reservarse para pacientes con adiposidad leve o moderada y con una piel tonificada, es decir, que tiene buena capacidad de retracción. Del mismo modo, si la piel del paciente no tiene buena elasticidad y tono, el resultado final seguramente no será agradable.
Para superar este inconveniente, las inyecciones de ácido desoxicólico se pueden asociar a otros tratamientos, como la radiofrecuencia fraccionada (una onda electromagnética) y el HIFU (ultrasonido: Ultrasonido Focalizado de Alta Intensidad). Estos procedimientos recientemente desarrollados realmente representan el último paso antes de un estiramiento facial quirúrgico. Consisten en una especie de daño controlado en la piel y el tejido adiposo, al que seguirán una serie de procesos fisiológicos, como la creación de nuevo colágeno.
Si la cantidad de tejido adiposo es realmente llamativa, o si el exceso y laxitud de la piel son severos, será necesario recurrir a la cirugía.