Eficiencia y seguridad. Noticias.

Una técnica que se ha desarrollado en los últimos años es el uso de grasa derivada de la liposucción para aumentar los senos o restaurarlos después de una mastectomía. Existe un debate considerable entre los cirujanos plásticos con respecto a la efectividad y seguridad de la técnica. Por ello, se están realizando diversos estudios que intentan esclarecer el paisaje.

Un nuevo estudio publicado por la Facultad de Medicina de la Universidad de Pittsburgh y publicado en Tissue Engineering Part A. con respecto a la seguridad de las células madre es bastante interesante. Esta publicación se refería a la implantación de grasa en los senos de mujeres que se habían sometido a mastectomías para su reconstrucción. Sin embargo, es de interés más general en cuanto al uso de células madre. En este estudio, se usó grasa para crear un nuevo seno en mujeres que se habían sometido a una mastectomía. El resultado del estudio fue que se considera completamente seguro usar la grasa en personas cuyo cáncer ha sido curado. Por el contrario, no se recomienda su uso para personas cuyo cáncer está en curso, ya que puede acelerar la enfermedad.

El estudio tiene un significado más general, es decir, en personas que no padecen cáncer, el uso de células madre grasas se considera seguro. Las células madre en casos específicos ayudan a absorber mejor la grasa. Se sabe que cuando se implanta grasa que ha sido extraída por el método de la liposucción, una gran parte de ella es absorbida por el cuerpo. El porcentaje de grasa que queda depende de varios factores y para el organismo suele oscilar entre un 30 y un 60%. El uso de células madre facilita la creación de nuevos vasos entre las células grasas y por tanto su más rápida y mejor absorción.

Entonces, de los estudios se desprende que el porcentaje de grasa que permanece en un área bien vascularizada es mayor que en un área mal vascularizada. Por eso, los vasos creados por las células madre ayudan a que la grasa sobreviva mejor. Esto es cierto para cualquier área donde se implanta la grasa, independientemente de si el estudio en particular analizó específicamente a aquellas mujeres a las que se les implantó la grasa en el seno. A partir de este, pero también de otros estudios, parece que el uso de células madre en personas que no padecen cáncer es seguro.